"Murió Savino" se tituló nuestra última nota. Algunos apresurados no alcanzaron a leer que se trataba de una sintética editorial cargada de ironía por su muerte política que ya acumula una decena de abriles. Los que leyeron el impactante titulo y cerraron el portal se quedaron con esa impronta, algunos festejaron, otros se preocuparon.
Nosotros tenemos informantes, adentro y afuera, y sabemos que el teléfono (móvil y particular) de Savino y su familia, explotó durante no pocas horas.
Nos alegramos de haberle regalado a Savino y su prole un mal trago, porque él a nosotros ya nos atragantó hace tiempo. Una trompada más, retoño de ésta casa y sacudida por nuestro brazo revolucionario.
Nuestro deseo, humilde y fervoroso, es dar algún día la noticia de su verdadero funeral.