martes, 19 de enero de 2010

SAVINO SE CAGA EN LA VUELTA A BOEDO

Al principio lo ocultaba, ahora lo expone. Son los estertores de su conducción, está acorralado y sabe que tiene el culo en la calle. Desplegó en el último tiempo su antivueltismo para destruir lo más posible la causa antes de su partida. El día que retornaron las cenizas de Lorenzo, mostró una mueca de bronca en el oratorio. Jamás le dio pelota al Proyecto La Gloriosa y ahora que el gobierno quiere meter pupitres y pizarrones en nuestra plaza, su mueca sonríe ante un golpe de nocaut a nuestro sueño.
Rafael Savino se caga en la Vuelta a Boedo y se rie de nosotros, mientras las inferiores tienen respirador artificial y la economía del club se desintegra, a la par de las renuncias de su escuadrón de secuaces. En nosotros está no permitir que siga lastimando a San Lorenzo y su futuro en sus últimos meses de vida política y vida biológica.