viernes, 15 de mayo de 2009

LADRILLOS Y LINGOTES (Por El Gaucho de Boedo)

El contador de días suma segundo a segundo un instante más de angustia. Con la ex Plaza Lorenzo Massa a nuestra disposición, más los terrenos ya adquiridos transformados en el Amazonas de Boedo, los cuervos no entendemos todavía por qué nuestros dirigentes gobiernan para los jugadores; por qué cambian, día a día, un ladrillo por un lingote.
A finales de la década del 70 San Lorenzo perdía de manera dolorosa y estigmatizadora el recordado Gasometro de Av. La Plata. Daba comienzo a un nuevo escenario, había que jugar en cancha ajena. Los sinsabores no se aquietaron allí, pocos años después de la perdida para muchos mas cruenta que haya sufrido el club, el destino decidió (como todo en la vida del club siempre ayudado por manitos nefastas) que el amado Ciclón de Boedo descendiera a la divisional B. Por primera vez un equipo grande del país perdía la categoría y fue San Lorenzo quien tuvo ese penoso honor. Han pasado muchos años, nos consta ver generaciones distintas que no fueron testigos oculares de los sucesos antedichos, pero a todas, las presentes y las ausentes con aviso, "cuervitos", nos acontece un mal en común. La ceguera. El Club Atlético San Lorenzo de Almagro se ha retraído mas que sustancialmente a lo largo de más de 30 años, tan solo casos concretos y puntuales como moscas en la sopa refutan lo antedicho , el Pedro Bidegain y algún que otro hecho puntual solamente , frenaron ligeramente lo que ha sido un retroceso muy grande . * "Corría la década del 40 y del 50 cuando en el Gasómetro se conglomeraban grupos masivos que realizaban las más diversas actividades", comentaba en la pizzería de Carlos Calvo y Av. La Plata una vieja gloria del bowling del Ciclón. * "Concurría día a día a nadar, logre ser campeona nacional de estilo libre compitiendo para San Lorenzo", añade la señora Lanis, sanlorencista de la primera era. Los testimonios que se recogen en cada rincón del barrio, en cada espectador entrado en décadas nos remiten a un momento de grandeza contrataste 100 por cien en lo que se aprecia llevar a los sanitarios de Ciudad Deportiva a un infante. Los dirigentes de San Lorenzo han dejado de lado de manera unilateral la postura de un solo ladrillo en Boedo, para ellos, y los hechos lo demuestran, no afianzar la presencia del club en su propio barrio es una cuestión de estado. El devenir de decisiones de los últimos años de la dirigencia actual marcan claramente como los ladrillos se han cambiado por lingotes, cemento por dólares de préstamos, comisiones y resarcimientos que ni el peor de los dirigentes trasnochados dejaría pasar. Si mejor que decir es hacer, lo hecho por nuestros dirigentes demuestra claramente que se hace todo en dirección contraria al verdadero crecimiento de la institución. Para los que Amamos a San Lorenzo es Ladrillos sin lingotes el titulo de nuestra nota ideal.

Nota publicada por "El Gaucho de Boedo" en DBV el 15 de Mayo.