FERNANDO MIELE: Señor Comisario necesito un panorama de la situación abajo, los suizos están nerviosos.
COMISARIO: Desde hace varias horas que están llegando los revoltosos, tenemos más de 1000 ene ene, esperamos órdenes para actuar.
FERNANDO MIELE: Sacamelos, que se me pudre el negocio.
COMISARIO: La orda de manifestantes es cada vez mayor señor, no es recomendable en éstos casos el choque. Aconsejo esperar la desconcentración.
FERNANDO MIELE: NO hay tiempo para esperar. Lo tuyo depende del arreglo con los suizos, ya lo hablamos.
COMISARIO: No, lo que hablamos en ningún momento dependía de lo que suceda ahí arriba. Mi parte está definida. No me gustaría tener que....
FERNANDO MIELE: ¿Tener que Comisario?....¿o quiere perder los negocios con Julio Grondona acaso?
COMISARIO: ¿Como procedemos señor?
FERNANDO MIELE: Ya te dije, limpiame la perito, sacalos al carajo. Se pudre el negocio, acá la situación es insostenible.
COMISARIO: ¿Algún impedimento para nuestro accionar?
FERNANDO MIELE: Sacalos como sea, pero sacalos.
La represión de la Policía Federal contra La Gloriosa fue desmedida, insólita y jamás vista. Helicóptero, carros de asalto, infantería, caballos y patrullas. El ejército de disfrazados de azul mandado a reprimir por Fernando Miele metió palo, gomas y gases. Los hinchas de San Lorenzo fueron salvajemente atacados, pero consiguieron expulsar a los suizos. Con el tiempo también debió irse Miele. ¿El Comisario?, seguramente cobró su tajada.